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Las uñas no me crecen y cuando lo hacen se abren en capas y se rompen. ¿Qué puedo hacer?

La uña es el anexo cutáneo que protege la punta del dedo donde tenemos terminaciones nerviosas para el tacto, presión y temperatura. Además, culturalmente tiene un gran significado estético, por eso es importante mantenerlas sanas.

La pérdida de la dureza, resistencia y flexibilidad de la uña, se le conoce como Síndrome de Uña Frágil (¡así es, tiene un nombre médico, no es solo un problema estético!). Las uñas se vuelven quebradizas, cambian de textura, le aparecen líneas a lo largo o se separa en capas, como si fuera un “milhojas”. Se vuelven opacas y delgadas. Esa delgadez hace que se rompan todo el tiempo. En algunos casos ni siquiera crecen.

El síndrome de uña frágil es el segundo motivo más frecuente por enfermedades de la uña en dermatología (el primero es la infección por hongos). Afecta al 20% de la población, afecta dos veces más a la mujer que al hombre. Y sobre todo al 30% de mujeres mayores de 50 años, porque tienen la piel y anexos más delgados por los cambios hormonales y por la pérdida de los lípidos y calcio en su estructura.

Además de la edad, existen otras causas que el dermatólogo debe descartar:

  • Deficiencias nutricionales
  • Causas endocrinas principalmente enfermedad tiroidea
  • Tratamientos con retinoides orales para el acné
  • Quimioterapia
  • Traumatismos mecánicos como morderse las uñas o limados excesivos
  • Exposición a sustancias químicas como alcohol, solventes, removedores de esmalte y uñas acrílicas
  • Exposición repetitiva a la humedad o al agua en trabajos de limpieza, estilista, o personal de salud.
    La presencia del COVID y el hecho de lavarnos más seguido las manos o usar alcohol en gel, está incrementando el problema.

Algunas enfermedades como la psoriasis, el liquen plano, el eczema, etc., están asociadas, por eso es importante hacer la consulta con el dermatólog@. Además, esta condición tiene impacto psicosocial, ya que la apariencia cosmética afecta al que lo sufre por eso hay que prevenir y tratarla.

¿Qué podemos hacer?

  • Para cuidar las uñas frágiles es mejor mantenerlas cortas e hidratadas.
  • Usa una crema emoliente rica en fosfolípidos, úrea o ácido láctico en tus manos después de lavarte o desinfectarte con gel.
  • Usa algún producto hidratante específico para las uñas que contenga queratina. No hablo de los endurecedores que engruesan la uña, pero la deshidratan y al final pierde elasticidad.
  • Evita la exposición prolongada al agua.
  • Usa guantes de algodón por debajo de los guantes de vinilo o látex.
  • Usa removedores de esmalte libres de acetona.
  • No manipules la cutícula, ni limes la uña en exceso en la manicura.
  • Evita las uñas de gel, o acrílicas ya que el pegamento y el retiro es traumático.
  • Supleméntate con Biotina y Calcio.

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